Desde hace ya bastantes años, es posible encontrar en Internet unos productos elaborados con plantas medicinales que se venden para fines lúdicos. Un grupo de estos productos se presentan con el nombre genérico de ‘éxtasis vegetal’. Son sustancias estimulantes, mayormente de origen natural, que se publicitan como carentes de efectos secundarios, por lo que algunos usuarios pueden considerarlos como una alternativa sana y segura al éxtasis químico. Sin embargo, las sustancias que lo componen pueden resultar también peligrosas.
El éxtasis vegetal lo componen muchos preparados variables, ya que están compuestos por diversas plantas y compuestos químicos. Sin embargo, la mayoría de preparados tienen en común: Plantas ricas en cafeína, como nuez de cola, guaraná o té; plantas con precursores anfetamínicos como la efedra; plantas como pasiflora, ginkgo o ginseng; plantas exóticas como el kava-kava, la damiana o la salvia; y sustancias químicas como la L-arginina, la fenilalanina u otras.
Debido a la presencia de cafeína y de productos anfetamínicos, el éxtasis vegetal es un estimulante de la corteza nerviosa. Por eso, está contraindicado en caso de trastornos cardiovasculares como hipertensión, insuficiencia cardiaca o insuficiencia coronaria. Y tampoco se debe utilizar cuando hay cuadros de ansiedad o insomnio, ya que todas estas sustancias pueden agravar las crisis de angustia.
De igual modo es peligroso utilizarlo si se padece diabetes, ya que la efedrina puede elevar la glucemia, Y el ginseng, por su parte, tiene un efecto hipoglucemiante, por lo que puede producir una hipoglucemia severa.
Como también es muy frecuente el consumo de estas drogas en interacción con el alcohol, es importante tener en cuenta que el éxtasis vegetal puede potenciar los efectos depresores del alcohol y producir una depresión respiratoria.
Asimismo, el uso o el abuso de estas sustancias puede dar lugar a reacciones adverses, como nerviosismo, temblores, insomnio, excitabilidad, cefaleas, náuseas, vómitos, dolor abdominal, hemorragias, taquicàrdia, hipertensión, etc. Y en algunos casos, pueden aparecer reacciones alérgicas.
Aunque estos productos se han comercializado asegurando su seguridad y legalidad, se han recogido más de 800 reacciones adversas asociadas al consumo de estos preparados. De estos 800 casos, 17 resultaron mortales, por lo que EE.UU decidió prohibir la fabricación y comercialización de estas sustancias.